El método Seis Sigma toma su nombre de un término estadístico utilizado para medir la variación en un proceso. En estadística, "sigma" (σ) representa la desviación típica de un conjunto de datos, que es una medida de la dispersión o variabilidad de los valores en relación con la media.

Significado de "Seis Sigma

Seis Sigma significa literalmente "seis desviaciones estándar". En el contexto de la calidad de los procesos, esto se traduce en un rendimiento en el que el 99,99966% de los productos o servicios están libres de defectos. En otras palabras, corresponde a un máximo de 3,4 defectos por millón de oportunidades (DPMO). Este objetivo, muy ambicioso, pretende reducir casi por completo los errores y variaciones en los procesos industriales y comerciales.

Origen del método

El método Seis Sigma fue desarrollado por Motorola en la década de 1980. Fue introducido por el ingeniero Bill Smith en 1986, con el apoyo del entonces Director General de Motorola, Bob Galvin. El objetivo era abordar los problemas de calidad y variabilidad de los procesos que afectaban a la satisfacción del cliente y a los costes de producción.

Motorola descubrió que los métodos tradicionales de gestión de la calidad no bastaban para alcanzar los niveles de rendimiento deseados. Combinando técnicas estadísticas rigurosas con un enfoque metodológico estructurado, el equipo de Motorola pudo desarrollar una estrategia eficaz para identificar, medir, analizar, mejorar y controlar los procesos. Esta estrategia recibió el nombre de "Seis Sigma" en referencia al objetivo de rendimiento estadístico que se había fijado.

Adopción y evolución

El éxito de Seis Sigma en Motorola pronto atrajo la atención de otras grandes empresas. General Electric, bajo la dirección de Jack Welch, fue una de las primeras en adoptar y popularizar el método en la década de 1990. Desde entonces, Seis Sigma se ha adoptado ampliamente en sectores que van desde la fabricación y la sanidad hasta los servicios financieros y la tecnología de la información.

Conclusión

El método Seis Sigma se llama así por su objetivo de reducir las variaciones de los procesos a un nivel muy bajo, correspondiente a seis desviaciones estándar de la media. Desarrollado por Motorola en los años 80, revolucionó la gestión de la calidad al introducir un enfoque sistemático y estadístico de la mejora continua de los procesos.

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